Esta es una pequeña victoria en la batalla de casi toda la humanidad contra un reducido, pero poderosísimo racimo de genocidas que merecen un juicio como el de Nuremberg.
Fotógrafo, realizador audiovisual, guionista y productor. He aquí una forma convencional de presentarme. Pero como al menos una tercera parte de mi vida la dedico a dormir y otro tanto a tratar de soñar con lucidez, se puede decir que básicamete soy un soñador. Subsidiariamente también soy un sobreviviente de las aulas de la facultad de derecho, profesión que nunca ejercí, tal vez por rebeldía, aunque ella me ha servido para entender muchas cosas y defenderme de otras.
1 comentario:
como es costumbre, a los principales responsables no se les ve accediendo
Publicar un comentario