11.10.07

La ignorancia

En su novela “La Ignorancia”, el escritor de origen checoslovaco Milan Kundera dice lo siguiente:
“Durante lo que yo llamo su primer veintenio (entre 1918 y 1938), los checos pensaron que su República se disponía a vivir un tiempo infinito. Se equivocaban, pero precisamente porque se equivocaban vivieron aquellos años con una alegría que hizo florecer las artes como nunca”.

“Después de la invasión rusa, al no tener la menor idea del próximo fin del comunismo, se imaginaron de nuevo viviendo en un infinito, de modo que fue la vacuidad del porvenir, y no el sufrimiento de la vida real, lo que les quitó fuerzas, lo que sofocó su valentía y convirtió ese tercer veintenio en un tiempo tan cobarde, tan miserable”.
Ilusión de vivir un tiempo infinito de bonanza o de vacuidad… equivocación… tiempos florecientes y cobardes. A pesar de que ese texto haya sido escrito para describir una situación, un país y unos tiempos tan diferentes, leyéndolo no puedo dejar de pensar en lo que ocurre actualmente en nuestro propio país.

Es como si aquí esa cronología que describe Kundera se hubiese comprimido en un solo momento histórico. Así tenemos una mitad de la población (en realidad un tercio) que comienza a pensar que hemos entrado en el florecimiento de un tiempo infinito, lleno de promesas y de prosperidad, mientras que la otra mitad (otro tercio) comienza a pensar que hemos ingresado por la puerta grande a la vacuidad del porvenir.

Desencanto y aliciente simultáneos. ¿Pero qué dice Kundera de lo que fue su país? Dice que en ambas épocas hubo equivocación. ¿Será que en Costa Rica todos nos estamos equivocando de lleno? Quizás los que se engañan pensando que vamos a entrar en la prosperidad nos brinden unos años de alegría y de florecimiento cultural. Aunque temo que no sean los mejores artistas y literatos los artífices de tal prodigio, porque la mayoría de ellos (al menos de los que tengo noticia) se inclinaron por la tendencia que ahora solo ve vacuidad en el porvenir. ¿Será que eso les va a quitar las fuerzas y a sofocar su valentía? Evidentemente la invasión de los rusos a la antigua Checoslovaquia no es comparable a la dominación económica y cultural que suponemos nos traerán los estadounidenses, sin embargo su sola perspectiva, o la percepción que tengamos de la nueva época, nos puede resultar paralizante. ¿En qué tiempos estamos entrando verdaderamente? Y si nos estamos equivocando ¿Qué supondría no hacerlo? ¿Cuál sería la correcta perspectiva? Tal vez simplemente asumir que no hay eternos...¿No será mejor entonces vivir engañados? (al menos mientras llega el tiempo del gran desengaño).

5 comentarios:

Aguila Diurna dijo...

Puedo hablar desde la experiencia y reitero ojala Costa Rica no corra la misma suerte que mexico con el yugo del TLC.
Ahi te va una pequeña y loca síntesis de las consecuencias que este pueblo ha sufrido a través de la firma del tratado en 1994. Los políticos en aquella época se lo hacían digerir al pueblo diciendo "Mexico quiere ser parte del 1er mundo" que precio mas caro hemos pagado y seguimos estando en el 3ro o en el 4to mundo!
A traves de la disminución o eliminación de las tazas arancelarias de sus productos una cantidad de basura entra a nuestro país dando un tiro de gracia a la industria nacional. El primer producto que exporta Mexico a USA es gente, pero las leyes de reforma migratoria aun se hacen esperar, mientras nos construyeron un ofensivo muro que incrementa el número de víctimas de nacionalidad mexicana y centroamericana, que están dispuestos a dar la vida por cruzar la frontera.
Se que no tiene un formato elegante lo que te cuento, estoy hablando con el hígado.
Un ejemplo, Mexico cria pavos, los vende a USA a $10, ellos los empacan y nos los mandan de regreso con una etiqueta escrita en inglés, donde dice MADE EN USA. El costo del pavo gringo es de $40!!! Y aqui no nos queda mas que comprar de ese Pavo por que hay un desabasto para el consumo nacional.
Como los costos de mano de obra y aranceles impositivos aqui son menores, grandes marcas gringas (Victoria Secret, Levis, etc...) montan sus fábricas que les llaman maquiladoras, utilizando nuestra gente y nuestro sistema arancelario para sacar jugosos beneficos, como no pagamos aranceles fronterizos, con el TLC la materia prima ingresa a nuestro país sin restriccion ninguna y se devuelve un producto terminado a un costo irrisorio el cual se vende en todo el mundo, incluyendo méxico a un precio descomunal!
Sigo? para que hablar de la influencia cultural de una sociedad enferma, la cual observamos en que las cadenas norteamericanas tienen en méxico a sus mejores consumidores, hamburgueserias, llantas para autos, cafeterias, ropa, me puedo cansar de enumerar rubros y marcas que nos impregnan de costumbres que no nos pertenecen y nos alejan de la voz de nuestros ancestros.
Por cada ilusorio beneficio que nos brinda el TLC, hay mil lágrimas con las que hemos de pagar.
Que su camino no sea tan nefasto como el nuestro, en este caso la proximidad geográfica impone que nuestras esperanzas se contaminen con aromas de Burguer King.
No tengo la formación financiera para traducir lo que el TLC le hizo a México, pero si tengo la suficiente sensibilidad social para entender sus consecuencias.
Ya te debo haber cansado con este extenso comentario el cual solo quiere significar, mejor la verdad, clara y como es, aunque duela.
Un beso.
La humanidad se somete ante el poder económico de los poderosos y es una verguenza para la raza humana tremenda corrupción!

Eugenio García dijo...

Matilde, tu comentario me ha dejado apabullado. Por más que haya tenido noticia desde hace tiempo de lo que está pasando en México, siempre es impactante oirlo de boca (de pluma debería decir) de una mexicana.

Aquí los analistas del SI nos quisieron convencer de que lo que ocurre en México no se debe tanto al TLC como a la crisis económica que vivieron inmediatamente antes de su entrada en vigor. Nos vinieron a meter el cuento de que más bien el TLC sirvió para aminorar los efectos de esa crisis. Por supuesto que ninguno de ellos habló desde la experiencia que significa vivir sus consecuencias cotidianamente, ninguno habló desde la sensibilidad social y cultural como ahora lo haces tu; ninguno habló desde el hígado... que es como se debe hablar cuando se sufren en carne propia los nefastos efectos de un tratado injusto y esclavizante. Todo lo que esos analistas supieron enunciar fueron cifras... las eternas cifras con que nos engatuzan y contaminan.

Muchas gracias por tu gran aporte. Quisiera tu permiso para distribuirlo.

Tartaruga dijo...

Que buen comentario mexicano!!!
Alguien deberia hacer una revolucion....

Aguila Diurna dijo...

Por supuesto tienes mi permiso Eugenio y me parece excelente que no olvidemos que este es el inicio de un nuevo capítulo en la historia de Costa Rica y mas que hallar responsables deberemos de actuar como memoria de una raza amnésica y débil.
Un abrazo fraternal.
Matilde

Unknown dijo...

Gracias Quimera por ponerlo en ConCostaRica. Un abrazo, aún me quedan en estos días...